Nosotros tenemos este regalo de amor, pero es como una planta preciosa. No puedes solo aceptarla y abandonarla en la alacena o pensar que va a crecer por si sola. La tienes que seguir regando. Tienes que realmente cuidarla
martes, 13 de abril de 2010
aprendi a odiarla con el tiempo y me senti mucho mejor
No hay comentarios:
Publicar un comentario